Frente al escenario en el que actuaba la banda Coldplay, así acabaron su intrépida experiencia dos amigos que decidieron colarse en multitud de sitios con chalecos reflectantes, 'walkie-talkies' y bastante cara.
Todo comenzó una noche de fiesta, entonces Dave Allegretti y Sean Foster idearon su plan. Al día siguiente, lejos de olvidar lo que habían tramado, actuaron, compraron el material necesario y se lanzaron a la aventura, según publica el medio VICE.
Según ellos mismos han explicado, en todo momento tuvieron miedo de ser descubiertos, sin embargo, lograron entrar gratis al cine, al zoo y también a la actuación de Coldplay. Su historia ha tendido gran repercusión en las redes sociales.
