Según denunciaron las asociaciones alimalistas, la finca privada en la que se encontraban los simios albergaba una "colección" de diversas especies en condiciones de vida deplorables y un estado de abandono.

En un comunicado, los rescatadores han asegurado que los macacos se encontraban en jaulas minúsculas llenas de excrementos, siendo un foco de enfermedades y provocando una situación denigrante para la vida de los animales.

Las asociaciones han declarado que llevaban bastante tiempo buscando un lugar mejor para los mamíferos de la finca, que procedían del Zoologico de Berlín, donde se negaron a acogerlos al conocer la situación.

A pesar de que han cargado con los gastos empleados en el cuidado y en el trasladado de los macacos, el centro británico 'Alpes Ape Monckey Sanctuary' será, finalmente, el lugar de destino de los animales.

Por la dificultad de otorgar una vida mejor a los animales rescatados, los animalistas han solicitado que se creen "centros de rescate y reinserción de titularidad pública, gestionados por funcionarios y personal especializado, que aseguren una vida digna a todas aquellas especies procedentes de decomisos, circos, zoológicos o cualquier tipo de espectáculo con animales".