Recomendaciones de pastillas adelgazantes, publicidad de casas de apuestas... Son discursos peligrosos que campan a sus anchas en las redes sociales, donde los mensajes que lanzan los influencers a un amplísimo público no están sujetos a prácticamente ningún control.
Lorena Macías, la creadora detrás de @hazmeunafotoasí, trata de "señalar con humor" esas "malas prácticas que vemos en redes sociales" y que "no todo el mundo tiene herramientas para detectar", según ella misma advierte en conversación con laSexta.
En su cuenta de Instagram, donde no muestra su rostro, señala esos comportamientos nocivos, como la ética -o la falta de ella- a la hora de admitir si detrás de una publicación hay publicidad: "El hashtag 'ad' o el hashtag 'publi', que es lo que tienen que poner, lo empezaron a ocultar", denuncia.
En este contexto, el Gobierno pretende regular a través de un real decreto quiénes se considerarán "usuarios de gran relevancia" y así poder controlar el contenido. La propuesta actual del Ministerio de Transformación Digital es que se considere influencers a quienes generen al menos 300.000 euros de ingresos por publicidad al año o tengan dos millones de seguidores sumando varias redes sociales o un millón en solo una de ellas.
Baremos que, en opinión de Alejandro Perales, presidente de la Asociación de Usuarios de la Comunicación, son demasiado altos y "deberían descender", ya que "hay una gran cantidad de influencers que tienen 900.000 seguidores u 800.000, incluso 300.000 seguidores y que son tremendamente conocidos". Petición a la que se unen las televisiones comerciales, al igual que el Ministerio de Juventud, que también pide que esos baremos desciendan, algo unido también a la necesidad de proteger a los menores.
En este sentido, Catalina Perazzo, directora de Incidencia Social y Política de Save the Children, reclama que "ahora que se va a intentar regular" este ámbito, "se tengan en cuenta los derechos de niños y las niñas", porque hay contenidos peligrosos que lo son más todavía si los reciben los más pequeños.