La Audiencia Provincial de Pontevedra ha condenado a seis meses de prisión a dos empresarios acusados de obligar a todos sus empleados a trabajar todos los días del año, según adelanta 'El Faro de Vigo'.

Estas condiciones ilegales, que excluían el día de Navidad y Año Nuevo, constituyen un delito contra los derechos de los trabajadores pero también un delito de defraudación a la Seguridad Social por todas las horas extra que dejaron sin abonar.

Durante cuatro años ambos acusados, que han reconocido los hechos, exigieron este requisito indispensable que los empelados cumplían "ante el temor de perder su puesto de trabajo".

No obstante, la sentencia establece además que deben abonar la cantidad correspondiente de todas las horas extras realizadas durante 203 sábados y 252 domingos y que la deuda acumulada con la eguridad Social, que asciende a 238.743 euros, será abonada en plazos.

También se les ha impuesto una multa de 29.905 euros y no podrán obtener subvenciones ni beneficios fiscales durante nueve meses.