Margaret Holcomb, una mujer de 81 años de Amherst, Massachusetts, hizo crecer en su jardín una única planta de marihuana junto a sus plantas de frambuesas con el fin de tratarse ella misma enfermedades propias de su avanzada edad: glaucoma, artritis e insomnio ocasional.
La Policía Estatal de Massachusetts se enteró de esto y mandó un helicóptero, varios vehículos y un puñado de agente a la casa de Holcomb para cortar de raíz la planta y llevársela en una camioneta. Según cuenta, la policía se encuentra realizando redadas masivas antidrogas a lo largo del Estado.
En unas declaraciones al 'Daily Hampshire Gazette' Margaret asegura que no se ha sacado la licencia que le permite plantar marihuana debido a lo difícil que es conseguir la aprobación de un médico. Y por otro lado, un viaje al pueblo más para conseguir marihuana cultivada por otra persona le resulta bastante caro.