Elizabeth Hughes, una canadiense de 36 años, llevaba tres años recibiendo una ayuda para las madres solteras. La mujer aseguró al departamento de Trabajo y Pensiones que había roto con su marido.
La mujer recibió entonces una subvención por tener a cargo a sus dos hijos. Durante este tiempo Elizabeth ha usado este dinero para pagar sus deudas.
En una investigación de la policía, los agentes descubrieron que el marido de Elizabeth había subido unas fotos a su cuenta de Facebook en la que aparecían los cuatro miembros de la familia de vacaciones.
Finalmente, la acusada confesó que durante ese tiempo todavía estaban casados y viviendo juntos en el mismo domicilio. Ha asegurado a la corte que "sólo habían estado separados durante tres o cuatro meses".
El matrimonio tenía cuentas bancarias que estaban utilizando conjuntamente durante este periodo. Según la investigación con ese dinero se pagaron "vacaciones, licencias de televisión y otros gastos de la casa".
Durante la época en la que supuestamente estaban separados la acusada también publicó en las redes una foto titulada "el mejor marido".
La justicia ha condenado por fraude público a esta mujer. Elizabeth Hughes tendrá que cumplir ocho meses de prisión.