La Policía Local de A Coruña atendió a una llamada de un menor de 14 años que decía estar siendo agredido por su padre. Los agentes se presentaron en el domicilio y, según informa 'La Voz de Galicia', se entrevistaron con los progenitores del niño, que explicaron a los agentes la situación.

Los agentes observaron las marcas que el menor presentaba en su pierna izquierda, que tenía ligeramente levantada la piel. Un médico procedió a examinar si sufría más daños, y procedieron a la detención del padre.

El progenitor fue trasladado a dependencias policiales y puesto a disposición judicial, acusado de un delito de violencia doméstica en el ámbito familiar.

Este caso recuerda al sucedido en la misma localidad cuando otro menor denunció a su madre por propinarle una bofetada y a quien el juez absolvió por considerarla "justificada".