Michelle Carr, una mujer inglesa ha estado a punto de morir atropellada en la gasolinera en la que trabaja al intentar detener a un ladrón. La mujer vio como el hombre intentaba irse con su vehículo sin abonar el importe correspondiente al combustible repostado.

Para detener al ladrón, Michelle se colocó delante de su coche, pero en lugar de lograr su objetivo, fue atropellada. Afortunadamente, no ha sufrido daños, aunque, según publica el 'Daily Mail', se encuentra en estado de shock. El vídeo, que acumula miles de reproducciones, podría ayudar a la Policía a dar con el ladrón.