Aunque no se han definido a sí mismas como el '#MeToo' español, se trata del primer movimiento en el país creado específicamente para perseguir y acabar con los abusos sexuales en el mundo cultural.

En cualquier caso, la "metodología" que llevan a cabo difiere de la del movimiento inicial originado en octubre de 2017 contra el productor Harvey Weinstein, ya que se trata de una organización que está creando una estructura específica para "luchar" contra las agresiones, y no de denuncias espontáneas publicadas en la redes sociales.

Según han informado a través de la lectura de un manifiesto ante los medios, el grupo se constituyó el pasado julio de 2017 como plataforma de apoyo a la artista Carmen Tomé, quien denunció de manera pública haber sufrido un abuso sexual por parte de Javier Duero en el contexto del programa de Residencias A Quemarropa en Alicante.

"Estamos aquí para abrir La Caja de Pandora públicamente y mostrar nuestro apoyo a Carmen Tomé y a todas las Carmen Tomé que ha habido y que desgraciadamente hay. Nosotras si os creemos", recoge el manifiesto, leído por una de las integrantes del grupo, que ha matizado que no "va a desvelar su nombre" puesto que "se encuentra en medio de un juicio".

De este modo, a través del anonimato y sin un organigrama establecido, las "pandoras" han señalado que no van a conceder entrevistas y que sólo van a contestar a las preguntas de la prensa a través de un correo electrónico, con el fin de establecer respuestas "formuladas por todas las integrantes del colectivo".