Pascual es el tío de Jessica, él presenció el incidente que motivó que ella denunciara a su expareja el día 2 de noviembre. "Ella dijo tira el cuchillo, tira el cuchillo", explica.

En casos como este, al denunciar, Policía o Guardia Civil evalúan el riesgo de la víctima; una valoración, según los expertos, infuciente en ocasiones.

Pilar Martín Nájera, fiscal de Violencia sobre la Mujer, ha dicho en la SER que "se necesita una unidad forense de valoración integral que esté en los juzgados".

Según la fiscal, a Jessica se le catalogó como riesgo medio. Una valoración que podría incluir vigilancia aleatoria y acompañamiento, pero que de haber sido alta o extrema, se podría haber controlado los movimientos de Imanol, e incluso haber vigilado la salida del colegio, donde ocurrió el asesinato.

Susana Martínez, presidenta de la Comisión para la Investigación de los Malos Tratos, afirma que "es un test estándar que sale de un sistema informático y que es igual para todas las víctimas de violencia". Por eso, destaca que no es suficiente "para valorar correctamente el riesgo"

Desde los colectivos de mujeres, lamentan, además, la falta de medidas preventivas, sobre todo cuando en este caso había cuatro denuncias previas y una condena el año pasado. "Falla que los jueces no decretan prisión provisional para el agresor desde el minuto uno el el que hay una denuncia de una mujer", subraya Lorena Abellán, vicepresidenta de Mujeres Unidas contra el Maltrato.

El Pacto de Estado recoge medidas que mejorarían estos protocolos, por esos las asociaciones reclaman que se ponga en marcha cuanto antes.