La defensa de Juana Rivas ha presentado este martes al Gobierno la solicitud de indulto total después de que haya sido condenada por el Tribunal Supremo a dos años y medio de prisión por sustracción de menores, así como a inhabilitación especial para ejercer la patria potestad respecto de sus hijos durante otros seis años y ha alegado que cometió el delito por un motivo "comprensible desde el punto de vista humano" como es "proteger a sus hijos".
El letrado Carlos Aránguez, que ha asumido la defensa de Rivas ante el Supremo, se muestra convencido de que en este caso "se cumplen todos los requisitos para que se le otorgue este derecho de gracia", pues por una parte su cliente carece de antecedentes penales anteriores o posteriores a los hechos por los que ha sido condenada, tiene domicilio estable y dispone de una fuerte red de apoyo familiar y social.
Su defensa alega que el móvil por el que esta madre de Maracena (Granada) cometió el delito "es comprensible desde el punto de vista humano, pues sólo pretendía proteger a sus hijos.
"Como víctima de violencia de género recibe la atención adecuada de los servicios municipales de Maracena, localidad en la que es querida y valorada por sus vecinos", según agrega en un comunicado.
Recalca que, de hecho, más de 400.000 personas y 54 entidades de diferentes ámbitos han mostrado su apoyo a la petición de indulto para Juana Rivas, quien ha recabado a través de una campaña solidaria fondos suficientes para satisfacer la Responsabilidad Civil, que ya ha sido puesta a disposición de la acusación particular en el procedimiento.
La defensa de Rivas mantiene además que la justicia italiana continúa investigando las denuncias interpuestas por violencia familiar y "existe un procedimiento civil sobre la custodia de los hijos actualmente en curso, en el que se está realizando una nueva prueba pericial sobre los menores".
Juana Rivas ha sido condenada después de que en mayo de 2016 viajara a España con sus dos hijos y no regresara a Carloforte (Italia), donde llevaba conviviendo tres años con su entonces pareja. El 2 de agosto le comunicó que no iba a regresar a Italia y escolarizó a los niños en un colegio de Maracena (Granada).
El progenitor, que tenía la guarda y custodia provisional de los dos menores, denunció los hechos y un juzgado de Primera Instancia de Granada acordó la inmediata restitución de los menores a Italia como Estado de residencia habitual de los dos niños.
Tras varios requerimientos para que devolviera a sus hijos, el 26 de julio de 2017 Rivas se ocultó con ellos, y su expareja denunció la desaparición. Juana Rivas entregó a los dos niños un mes después, el 28 de agosto de 2017, en la Comandancia de la Guardia Civil de Granada.