Israel ha confirmado la muerte de un hombre que había contraído por segunda vez el coronavirus, tras contagiarse tres meses después de pasar el virus de una nueva variante de COVID-19.

Es el primer caso de este tipo en Israel en el que muere un paciente reinfectado de la enfermedad y ha sido confirmado por el Centro Médico Sheba, situado cerca de Tel Aviv.

El hombre, de 74 años, era residente de una residencia de ancianos y había pasado el coronavirus en agosto, aunque en noviembre volvió a ser ingresado por dificultades respiratorias y murió el mismo día que fue hospitalizado.

Los casos de reinfección de COVID-19 solo se han registrado en un pequeño número de pacientes en todo el mundo.

La primera muerte, en Holanda

El primer caso de una muerte por reinfección confirmado en el mundo fue el de una anciana de 89 años, natural de Países Bajos, que murió en octubre tras contraer de nuevo el coronavirus.

La mujer estaba siendo tratada de macroglobulinemia de Waldenström, un tipo raro de cáncer que es tratable pero incurable. Los hallazgos se han publicado en Oxford University Press, y constatan que la reinfección se ha producido por una cepa diferente del virus.

La mujer ingresó en urgencias a principios de año, con fiebre alta y tos. Tras dar positivo en coronavirus permaneció hospitalizada durante 5 días y se recuperó por completo, a excepción de una fuerte fatiga.

Casi 2 meses después, solo dos días después de un nuevo ciclo de quimioterapia, volvió a tener fiebre, tos y problemas respiratorios. Volvió a dar positivo en coronavirus, aunque las pruebas de anticuerpos fueron negativas en los días 4 y 6.

El octavo día de ingreso, el estado de la paciente se deterioró. Murió dos semanas más tarde.

Los análisis practicados a la mujer confirmaron que la composición genética del virus era diferente en cada una de las dos infecciones, de una forma no explicable por la propia evolución del coronavirus. Esto respalda el hallazgo de que la mujer sufría de una reinfección por coronavirus.