Cinco mujeres que eran explotadas sexualmente por una banda criminal en Cartagena estaban retenidas en el diminuto sótano que aparece en el vídeo. Las víctimas vivían prácticamente en una prisión, vigiladas las 24 horas del día por unas cámaras de seguridad y encerradas tras un portón de acero.

La Policía ha detenido a sus captores, que las tenían secuestradas y amenazadas, y estaban fuertemente armados con machetes, pistolas y un arma de fuego que simulaba ser un bolígrafo. Además de obligar a las víctimas a prostituirse, esta red criminal también se dedicaba al tráfico de estupefacientes.

Durante el estado de alarma, los miembros de la banda criminal pusieron en marcha un sistema de envío a de droga a domicilio. De hecho, durante seis registros policiales se han encontrado miles de pastillas y medio kilo de sustancias ilegales. Además, la Policía ha incautado 12.000 euros en efectivo.