La Fiscalía de Barcelona está estudiando la difusión de imágenes de la víctima de Dani Alves por si pudiera ser constitutiva de delitos de revelación de secretos o contra el honor y la intimidad. Así lo han trasladado fuentes fiscales a laSexta, después de que la propia madre del futbolista haya filtrado imágenes de la joven a través de sus redes sociales.

Las mismas fuentes señalan además que la Fiscalía interesará a la Sala Penal de la Audiencia Provincial de Barcelona, que juzgará los hechos, que proteja la imagen de la víctima el día del juicio oral, que arranca el próximo 5 de febrero y se prolongará hasta el día 7 del mismo mes.

Por su parte, la abogada de la víctima ha emitido un comunicado en el que denuncia que "la difusión de imágenes o cualquier información que permita la identificación de una víctima de violencia sexual constituye un delito flagrante".

Así, la acusación particular advierte de que instará acciones judiciales "contra todas aquellas personas o medios que difundan las imágenes" de su clienta o "faciliten cualquier información, directa o indirecta, que permita su identificación". "Es lamentable que, a fecha de hoy, se siga intentando destruir a las personas que se atreven a denunciar", concluye la nota.

A un mes del juicio

El juicio contra Alves será los días 5, 6 y 7 de febrero. La Fiscalía pide para él nueve años de cárcel por violar a una joven el 30 de diciembre de 2022 en una discoteca de Barcelona, así como 10 años de libertad vigilada y 150.000 euros de indemnización. La víctima, por su parte, pide que sea condenado a 12 años y a una multa de 13.500 euros, así como una indemnización.

El futbolista lleva desde enero del año pasado en prisión provisional y la Audiencia de Barcelona ha rechazado concederle la libertad condicional en varias ocasiones, la última a finales del pasado mes de noviembre, por considerar que persiste el riesgo de fuga.

Dos detenidos

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Todo empezó a la hora de la siesta, cuando llamaron a la puerta y aparecieron dos encapuchados: "Uno subió la escalera hacia arriba y el otro me empujó al salón y vio a mi marido hablando por teléfono".