Kasim Khuram, un joven de 23 años, ha sido condenado a seis años de cárcel tras entrar en una funeraria de Birmingham, Inglaterra, con la intención de robar joyas y acabar teniendo relaciones sexuales con el cadáver de una mujer recién fallecida, según confirma la BBC.

Los hechos ocurrieron el pasado mes de noviembre en la 'Funeraria Cooperativa del Centro de Inglaterra' en Walsall Road. Al llegar la Policía, gracias a que saltó la alarma antirrobo, los agentes vieron que varios ataúdes estaban abiertos y que le había quitado varias prendas a uno de los cuerpos. Gracias a una prueba de ADN se pudo vincular a Kasim con el cadáver y terminó por confesar los hechos.

En su defensa, Khuram alegó que estaba bajo los efectos de las drogas y el alcohol y que esa "psicosis" le conllevó a profanar los cuerpos, algo de lo que estaba "profundamente arrepentido".

No obstante, pese a que se intentó alegar un problema psiquiátrico, el juez del Tribunal de la Corona, Melbourne Inman, ha declarado que "ofendió toda sensibilidad humana" y por ello le ha condenado a seis años de prisión y durante diez años será identificado como delincuente sexual.