Mari Carmen ha tenido
que tomar una drástica decisión; dejar de comprar medicamentos recetados por
culpa del copago. "Con 615 euros al mes no puedo pagar todas las medicinas por
el copago", asegura.
Como ella, el 7% de los
jubilados ha abandonado parte de su tratamiento médico tras la entrada en vigor
del copago farmacéutico hace cinco años, según un trabajo de la Fundación Valenciana
de Investigación Sanitaria. "Sin esos medicamentos hay riesgo de ingreso en poco
tiempo o de muerte", señala Gabriel Sanfélix-Gimerno, jefe de investigación en
salud de Fisabio.
En concreto, multiplica
por tres el riesgo de morir. Advertencia que jubilados como Juan conocen, pero
no les queda otra que ahorrar en sus pastillas. "¿Qué puedo hacer? He dejado de
comparar algunos fármacos porque no me llega", señala.
Los fármacos más
golpeados por el copago han sido los que combaten la hipertensión arterial y la
insuficiencia cardiaca, con descenso del 6,8%, y también las estatinas, que
reducen el colesterol y que han bajado un 8,3%. "Los medicamentos para la
tensión son los que más se han dejado de tomar por el copago", señala Manuel
González, farmacéutico.
Un copago
contraproducente para los expertos porque lo que se ahorre el Gobierno lo
acabará pagando, incluso más caro, en los ingresos por recaídas.