Dos agentes de la Policía Nacional han salvado la vida de un hombre que sufrió un atragantamiento con un torrezno en un bar-cafetería de Alicante. Los policías le realizaron la maniobra de Heimlich, evitando así que se asfixiara.

Ocurrió el pasado jueves sobre las 11:00 horas en un establecimiento de la zona norte de Alicante donde dos pintores, padre e hijo, estaban almorzando en mitad de su jornada matinal. Los agentes también se encontraban en la cafetería, cuando el hijo, "muy alarmado" y al grito de "que se ahoga, por favor", les pidió ayuda.

Los agentes pudieron comprobar que el hombre no podía respirar y realizaba "gestos claros" de tener las vías respiratorias obstruidas y estar sufriendo un atragantamiento y dieron instrucciones a la Sala CIMACC-091 para que se dirigiesen al lugar los servicios sanitarios. Al ver que su vida corría peligro, comenzaron a realizarle la maniobra de Heimlich, un procedimiento de primeros auxilios que se realiza cuando una persona tiene la laringe obstruida.

Tras realizar los agentes la maniobra, la víctima pareció recobrar la respiración, pero acto seguido volvió a señalar a los agentes que sus vías respiratorias todavía estaban obstruidas, por lo que el segundo de los agentes continuó con la maniobra. Segundos después, el hombre expulsó por la boca un trozo de torrezno que le estaba obstruyendo la laringe. Tras ser auxiliado, comenzó a respirar con normalidad y agradeció a los agentes la ayuda prestada: "Me habéis salvado la vida".

Finalmente, padre e hijo se marcharon del local por su propio pie y no fue necesaria la asistencia de los servicios sanitarios. Más tarde, el hombre, de 57 años, entregó una carta de agradecimiento a los dos agentes y se hizo una foto con ellos.