La localidad vallisoletana de Traspinedo ha acogido este domingo una concentración en recuerdo de su vecina Esther López. Se cumplen dos años de su desaparición y el posterior hallazgo de su cadáver en una cuneta.

La pista de Esther se perdió la madrugada del 13 de enero de 2022. Su familia denunció su desaparición y así comenzó la búsqueda de la joven. La Guarda Civil rastreó pozos y ríos e incluso empleó un helicóptero. Un trabajo al que también se unieron vecinos que realizaron diversas batidas.

Sin embargo, fue un senderista quien encontró, casi un mes más tarde, el cadáver de Esther en la cuneta de una carretera que, curiosamente, ya había sido inspeccionada anteriormente por la Guardia Civil. Presentaba signos de haber sido atropellada.

Durante estos dos años se ha investigado a tres amigos de la víctima, aunque la jueza eximió a dos de ellos. El tercero es el principal sospechoso del atropello mortal de la joven vecina de Traspinedo.

El informe final de la Guardia Civil es contundente: su amigo la agredió y posteriormente la atropelló cuando ella estaba de espaldas. El relato apunta a que el investigado escondió el cuerpo sin vida de la víctima durante semanas y finalmente lo abandonó en la cuneta.

El proceso judicial continúa abierto y la jueza ha decretado, nuevamente, una prórroga de seis meses para la investigación -a la espera de nuevas pruebas-. Mantiene al acusado en libertad con medidas cautelares. Éste mantiene que es inocente. Los padres de Esther, por su parte, piden su ingreso en prisión de manera provisional.