Una mujer que mató a su hijastro de 6 años, al que envenenó, torturó y dejó sin comer durante semanas ha sido condenada a cadena perpetua con una pena mínima de 29 años en prisión.

Medios británicos como 'The Guardian' detallan que tanto ella, Emma Tustin, como el padre biológico del menor, Thomas Hughes, sometieron al pequeño al "sufrimiento más inimaginable" mediante un "comportamiento rencoroso y a veces sádico".

El hombre, de 29 años, también fue condenado a 21 años de prisión por homicidio involuntario. La pareja fue declarada culpable de los hechos este jueves después de un juicio de ocho semanas de duración, en el que se dieron los detalles del crimen.

Tustin mató a Arthur el 16 de junio del año pasado al golpearle violentamente en la cabeza, lo que le provocó heridas "graves y devastadoras", dijo Wall. "La cantidad de violencia que se empleó contra él produjo fuerzas en su cuerpo que se dice que son equivalentes a las que de otra manera podrían haber sido producidas por un accidente de tráfico de alta velocidad".

Además, envenenó a Arthur con sal durante varias semanas, dándole una cantidad significativa en las horas previas a su muerte. Cuando ingresó en el hospital, los niveles de sodio en la sangre eran tan altos que no se podían medir con precisión con el equipo del hospital, y se encontraron 130 hematomas en su cuerpo.