El preferido de los expertos
Cómo sería vivir en una España sólo con el horario de invierno
¿Por qué es importante? El horario de invierno es el que consideran los expertos que, si se eliminaran los cambios de hora, sería menos perjudicial para nosotros. ¿Así sería?

Cuando hablamos de eliminar los cambios de hora, como ha pedido Pedro Sánchez, nos animamos pensando en cómo sería vivir en un eterno horario de verano. Pero no nos vengamos arriba, porque los expertos siempre han sido claros al respecto: el horario de invierno es mejor para la salud. En términos de sueño, por ejemplo: la Sociedad Española del Sueño (SES) asegura que la hora de invierno promueve un ritmo biológico más estable que el de verano, por lo que contribuye a mejorar el rendimiento intelectual y ayuda a disminuir la aparición de enfermedades cardiovasculares, de obesidad, de insomnio y de depresión.
Los expertos en energía también apuntan a acabar con los cambios de hora, que ya no son fuente de ahorro como lo eran en su origen, pero no tienen una preferencia clara. Tampoco la tiene el Gobierno, por lo que la decisión de fijar uno u otro habría de ser por consenso, teniendo en cuenta la opinión de todos, y decidiendo entre los países de la UE. Pero por mucho que los expertos vayan a favor del horario de invierno, no es lo que quieren los españoles. ¿Y cómo sería así la vida?
Los más afectados serían los residentes en las costas de Cataluña y Baleares. Aquí, en los meses de primavera y verano, de marzo a octubre, cuando tienen mayor actividad turística, amanecería entre las 5:00h y las 6:00h de la mañana, y también se adelantaría el atardecer. De vacaciones en Menorca, uno podría, si quisiera, madrugar y plantarse a orillas del mar a partir de las 5:00h de la mañana para guardar sitio en la playa... pero lo de estirar las tardes se acabarían: a las 20:00h uno ya estaría casi bañándose bajo la luz de la luna.
Otra implicación importante en esta zona sería la relacionada con la fiesta: los más trasnochadores, esos que pasan entera la madrugada fuera de casa, llegarían a casa con 'solazo'. En Madrid, por ejemplo, el amanecer se adelantaría en esta época para tener lugar en torno a las 5:45h, mientras que sobre las 21:00h ya se estaría haciendo de noche, lo que acortaría la costumbre de alargar las cañas de verano después del trabajo y las terrazas dejarían de tener luz una hora antes. Que este es uno de los pequeños placeres de este país.
Por eso, aunque los hay que insisten en acabar con los dos cambios de hora al año, también hay muchos expertos que siguen apostando por mantener el cambio horario. Dejar un horario definido y fijo los 365 días del año haría que cada seis meses anocheciera con tres horas de diferencia. "España no es Kenia". Así que todavía está por ver si llega la hora de dejar el reloj fijo.