Llegas a tu coche y te das cuenta con desagrado de que hay un papelito en el parabrisas. A veces con las prisas y el disgusto, no te fijas en nada más y pagas para olvidarte lo antes posible del asunto. Ésta es precisamente la actitud que parecen buscar los autores de las más de 80 multas falsas que han aparecido en los últimos días en el distrito madrileño de Carabanchel (Madrid).

¿Quieres saber más? Son 2 min.

Ojo, nos la cuelan. La Policía Nacional y el Ayuntamiento de Madrid ya están investigando esta presunta estafa que parece diseñada para hacerse con datos personales.Mientras tanto, han dado las claves básicas para distinguir las infracciones falsas de las verdaderas.

A la izquierda, una multa falta. A la derecha, una real
  • El código QR. Es lo más fácil y rápido de comprobar. Ninguna infracción auténtica lleva incrustado un código QR para realizar el pago, según el Ayuntamiento de Madrid. Por el contrario, las falsas tienen uno que ocupa gran parte de su diseño y situado en su área central. Si el ciudadano pica y lo escanea, acabará en una página del Ayuntamiento de Madrid donde presuntamente tendría que hacer el pago de la multa. Realizarlo es imposible a través de este cauce. Sin embargo, se está investigado si, al activar el QR, los presuntos estafadores podrían hacerse con los datos personales de nuestro terminal móvil.
  • El encabezamiento. Ambas multan llevan el logo del Ayuntamiento de Madrid. Sin embargo, la verdadera lo incluye más pequeño y en una esquina. En la infracción real aparecen también recuadradas las palabras "Estacionamiento regulado", si se trata de una infracción relativa al aparcamiento en estas zonas.
  • El reverso. Es también uno de los "tics" gráficos para distinguirlas. Las multas de verdad tienen en su reverso los pasos para poder realizar el pronto pago de la infracción económica. Las de pega, por el contrario, aparecen en blanco.

Y para estar seguros del todo: Menos datos, peor calidad y sin confirmación oficial.

  • Los detalles. Las multas verdaderas incluyen muchos más datos sobre la infracción y el infractor. Se detalla, por ejemplo, el lugar dónde se ha puesto la multa, la hora, la fecha, la matrícula del vehículo, la clave del agente que la ha dictado, más explicaciones sobre el delito vial, etcétera. Las falsas por el contrario son más escuetas y no aportan ningún rasgo personalizado sobre el vehículo infractor. Son mucho más "estándar", pensadas para poder distribuirse aleatoriamente.
  • El papel y la impresión. Aunque este tipo de detalles son "para nota" y no solemos fijarnos tanto en las prisas cotidianas, un rasgo que distingue a las multas falsas es que son "fotocopias". Si nos fijamos bien, el papel más rígido y el aspecto de la impresión así lo delatan.
  • La confirmación por correo. El Ayuntamiento de Madrid explica también que "cualquier notificación de sanción impuesta por agentes de la autoridad se envía por correo certificado o por la dirección electrónica vial". Ante la más mínima duda, por tanto, mejor llamar, contrastar con un agente o esperar a la comunicación oficial.

¿Aún quieres saber más? La Policía Municipal va a iniciar diligencias en relación a estas multas por un posible delito de falsedad documental y estafa. Los servicios informáticos del Ayuntamiento de Madrid ya están avisados.

  • Por el momento, las infracciones falsas han aparecido en el distrito madrileño de Carabanchel, aunque se está investigando si el fenómeno se ha extendido a más barrios.
  • Policía Nacional y Ayuntamiento de Madrid invitan a los ciudadanos a consultar con los agentes y con sus servicios de información ciudadana cualquier duda relativa a una infracción.