No parece muy buena idea, así de primeras, quitar a los niños el recreo en el cole y mucho menos decirles que se sienten, que se concentren en respirar y que se estén muy quietos.

Una ardua tarea que han conseguido en una escuela primaria de Baltimore, en Estados Unidos. Desde que empezaron el año pasado, el colegio no ha suspendido a ni un solo alumno, y todo gracias a la meditación, una alternativa al recreo que parece que ha resultado bastante exitosa.

Los niños cambian algunos días eso de salir al patio a gritar, jugar y pelearse por meterse en una sala llena de almohadas y luces bajas y respirar profundamente, enfocarse en su cuerpo y en su mente y relajarse del estrés del día a día.

Según informa el rotativo británico Metro, la iniciativa es una colaboración del centro docente con una ONG local llamada Holistic Life. El coordinador, Kirk Philips, explicaba a este medio que los resultados son sorprendentes. “Nadie se imagina que los críos puedan meditar en silencio, pero lo hacen”. Un ejemplo: la fiesta de Navidad. Los alumnos meditaron antes de recibir los regalos y consiguieron estar tranquilos para enfrentarse a un día tan excitante.

¿Podría ser esto posible en España? Al parecer al otro lado del charco, les funciona.