"Se sabrá la verdad"
La archidiócesis de Madrid interviene a las Monjas Hijas del Amor Misericordioso tras denuncias de abusos y de actuar "como una secta"
Los detalles Los expertos en la materia aseguran que el funcionamiento de esta organización cumple todos los requisitos para considerar que se trata de una secta: "Hay un excesivo culto al líder".

Resumen IA supervisado
La archidiócesis de Madrid ha intervenido la asociación de Monjas Hijas del Amor Misericordioso (HAM) y destituido a su líder, María Milagrosa Pérez Caballero, tras denuncias de abusos sexuales y psicológicos. Las integrantes de HAM, presentes en Madrid, Toledo y Sevilla, han sido acusadas de distanciar a los miembros de sus familias y de actuar como una secta. Expertos afirman que su funcionamiento es fanático, con un excesivo culto al líder. La gestión ha pasado a Pilar Arroyo Carrasco, quien promete revisar la estructura de gobierno y otros aspectos. Las familias esperan que la investigación revele la verdad.
* Resumen supervisado por periodistas.
La archidiócesis de Madrid ha intervenido la asociación de Monjas Hijas del Amor Misericordioso (HAM) y destituido a su líder, María Milagrosa Pérez Caballero, tras diversas denuncias por abusos sexuales y psicológicos.
Las integrantes de esta asociación difunden su fe a través de las redes sociales, mostrando la visión idílica de la vida religiosa. Sin embargo, según decenas de familias, esa imagen no tiene absolutamente nada que ver con la realidad.
Las Hijas del Amor Misericordioso, con presencia en Madrid, Toledo y Sevilla, han recibido decenas de denuncias por abusos, por distanciar a los miembros de su familias e impedirles comunicarse y, también, por actuar como una secta.
Los expertos en la materia aseguran que el funcionamiento de esta organización cumple todos los requisitos para considerar que se trata de un grupo fanático. "Las familias afectadas hablan de un excesivo culto al líder que determinaría hasta los aspectos más pequeños de la vida de sus seguidoras, lo que, a todas luces, sigue pautas de las propias sectas", explica Luis Santamaría, investigador y divulgador sobre sectas.
Sus fieles en Madrid se encuentran en un chalet de Los Molinos en el que permanecen recluidas sus fieles, a quienes el miedo les permite hablar. "En el momento que nos tengamos que defender lo haremos. No le tenemos miedo a nada", aseguran a laSexta a través de las vallas de la casa.
Tras este escándalo, la gestión de la asociación ha pasado a manos de otra religiosa, Pilar Arroyo Carrasco, que ha prometido "revisar y reconducir aspectos fundamentales, tales como la estructura de gobierno, el plan de formación, la vida comunitaria y el acompañamiento espiritual, además de revisar estatutos, reglamentos y la gestión económica".
Decenas de familia esperan que esa investigación y el paso del tiempo les permitan saber toda la verdad.