Un portavoz del Ejército del Aire alemán ha comunicado esta decisión, que afecta al único aparato de estas mismas características que había recibido hasta ahora la Bundeswehr y que le fue suministrado el pasado diciembre. Dicha fuente indicó que la interrupción de los vuelos de prueba se prolongará hasta que se aclare el motivo por el que se estrelló el avión, que se ensambla y prueba en Sevilla.
La Real Fuerza Aérea británica, por su parte, cuenta con dos aviones A400M de transporte militar, el primero de los cuales fue entregado el pasado noviembre, y ha encargado un total de 22 aparatos, que prevé recibir durante los próximos años.
"Las operaciones de los aviones A400M británicos han quedado interrumpidas mientras se lleva a cabo la investigación sobre el accidente en Sevilla. Nuestros pensamientos están con la familia y los amigos de aquellos que estuvieron involucrados en el siniestro", ha expresado un portavoz de Defensa londinense en un comunicado.
El avión militar siniestro, que estaba destinado a Turquía, se estrelló en las cercanías del aeropuerto sevillano en el que murieron cuatro trabajadores españoles del consorcio europeo Airbus. La central de Airbus Defence & Space, en París, ha creado un gabinete de crisis para analizar lo ocurrido y se prevé que un equipo de técnicos se desplace de Francia a Sevilla para investigar el siniestro.
El A400M es un avión militar de transporte que opera en Francia, Turquía, Reino Unido y Alemania, aunque en total hay ocho países que han realizado pedidos (los cuatro citados más España, Bélgica, Luxemburgo y Malasia).