Han pasado 20 años pero las heridas siguen abiertas. El 11 de marzo de 2004 dejó 192 personas asesinadas. Gran parte de ellas eran de Santa Eugenia y el Pozo, dos barrios obreros del sur de Madrid. laSexta ha acudido hasta allí para hablar con algunos de sus vecinos dos décadas después.

Julio fue uno de los supervivientes. Ahora, no puede evitar derrumbarse al recordar la imagen del tren sobre las vías: "Justo donde estaba el hueco de la explosión es donde yo me ponía todos los días a esperar el tren", ha explicado. Entre lágrimas, confiesa que él perdió el tren gracias a la televisión. El día anterior no había podido ver el partido del Real Madrid y se quedó viendo el resumen. Escuchó la explosión desde la cocina: "Desde entonces es como si me hubieran regalado de momento veinte años".

No es el único en Santa Eugenia y el Pozo que sienten lo mismo, que creen que se salvaron de milagro. Gloria nos dice que su marido también cogía normalmente el tren a esa hora. "Se salvó por una milésima".

Miguel Ángel estaba trabajando en su bar. De repente empezó a entrar la gente corriendo: "La gente empezó a venir en espantada, muy asustada. Venían con sangre muchos de ellos. Fueron días muy duros. Especialmente por los clientes que no volvieron a entrar al bar". Miguel Ángel asegura que ha sido imposible olvidarlos, que ha perdido a mucha gente conocida.

La imagen del tren reventado sobre las vías sigue todavía en la cabeza de muchos de los vecinos. "Estuvo el tren meses. Fue muy duro", comentan algunos de los afectados de barrios en los que nunca volvió a ser lo mismo. "Estuvimos mucho tiempo muy tristes. No podíamos hablarnos unos con otros. Cualquier conversación se nos saltaban las lágrimas", añaden.

El 11 de marzo de 2004 fueron asesinadas 192 personas. Ese día también se perdió parte de los vecinos de Santa Eugenia y el Pozo en aquellos trenes.