España tendrá garantizada la fabricación nacional diaria de 400 equipos de respiración asistida por parte de dos empresas, una ubicada en Móstoles (Madrid) que producirá cien diarias y la automovilística Seat.

Es uno de los anuncios que ha hecho el titular de Sanidad, Salavador Illa, durante su comparecencia en la comisión, que se ha iniciado con un minuto de silencio por los 10.003 fallecidos.

La empresa de Móstoles, Hersill (fabricante de material sanitario) va a producir a partir de mañana viernes hasta cien unidades diarias de equipos de respiración asistida y Sanidad ha formalizado un contrato de 5.000 para que se entreguen en las próximas semanas.

El ministro ha explicado que distintos fabricantes y equipos de ingeniería están trabajando en diseños y prototipos de respiradores de fabricación nacional y que la segunda empresa en cuestión es la compañía Seat, que va a iniciar la fabricación de 300 unidades de equipos de respiración invasivos.

Más de 30 millones de mascarillas y guantes

Además, el ministro ha recordado que hasta ahora se han distribuido 16.554.815 mascarillas, 16.373.100 guantes de nitrilo, 92.624 batas desechables e impermeables, 83.938 buzos, 135.191 gafas de protección, 142.200 soluciones hidroalcohólicas y 408.371 materiales como calzas, delantales, cubremangas y gorros.

Illa ha asegurado que "los datos del coronavirus demuestran que la curva se está estabilizando", aunque ha alertado de que "todavía quedan horas difíciles para el sistema sanitario". Ha explicado que estamos llegando al pico de la curva y a una fase de ralentización, pero ha avisado de que todavía hay acumulación de pacientes.

Illa: "Los datos del coronavirus demuestran que la curva se está estabilizando"

El ministro ha destacado que la tendencia de contagios se mantiene a la baja pese a la cifra de muertos. En las últimas horas hay 8.102 contagios más, un 7,9%, cifra que refleja una reducción respecto al miércoles; cuando ese incremento fue de un del 8,1%.

Por otro lado, durante su comparecencia el ministro ha insistido en la necesidad de cumplir el confinamiento y ha destacado que frente a las consecuencias económicas la salud es lo más importante: "Es un esfuerzo que pedimos a la ciudadanía, a todos. Habrá consecuencias económicas, pero sin la salud no hay economía, es lo primero".

Finalmente, Salvador Illa se ha mostrado optimista y ha afirmado que "hay luz al final del túnel" porque "el sistema sanitario tiene capacidad de respuesta" para salir de esta situación con "fortaleza y seguridad".