Rodrigo Rato ha presentado una reclamación ante la Oficina Municipal del Consumidor de Gijón en la que pide ser indemnizado por la desaparición de dos cojines que había llevado a arreglar a un pequeño comercio de esta localidad asturiana.
Tras intentar interponer la reclamación ante Comisaría, Rato fue derivado a la oficina del consumidor el pasado mes de enero, que ya ha realizado varios trámites del expediente abierto y está a la espera de un posible arbitraje amistoso que pueda solucionar este asunto.
Todo empezó el pasado mes de agosto, cuando Rato visitó la tienda de reparación de ropa y diseño gijonesa para pedir presupuesto para reparar dos grandes cojines que estaban descosidos por un lateral.
Poco después de visitar por primera vez el establecimiento, Rato dejó los cojines a la puerta, según señaló la dueña del local, aunque pasados los meses el expresidente de Bankia no volvió a aparecer.
Según ha relatado al diario 'El Comercio', la costurera pensó que no regresaría para recuperar unos cojines que por su volumen, de aproximadamente un metro de largo por cincuenta centímetros de alto, le molestaban mucho en el pequeño espacio de la tienda.
En ese momento, decidió deshacerse de ellos y los dejó junto a un contenedor de Cáritas, pero pocos días después Rato volvió a la tienda para exigir su recuperación. Al parecer, Rato "se enfadó muchísimo" cuando la mujer le explicó que se había deshecho de los cojines al pensar que no iba a recogerlos ante el tiempo transcurrido. Ahora, según el diario, reclama 380 euros por sus cojines.