El presidente interino del Tribunal Supremo, Francisco Marín Castán, ha arremetido contra PSOE y PP por ser "incapaces" de apartarse de sus "intereses partidarios" para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), dejando un panorama "desolador". Además, ha pedido dejar así de "cercenar" su independencia, que ha provocado también que el Supremo esté casi en una situación de "respiración asistida".

El discurso del presidente interino del Alto Tribunal en la apertura del año judicial y ante la atenta mirada del rey Felipe VI. Francisco Marín Castán ha arremetido contra los dos partidos, y ha dicho que "lo que está fallando es el impulso democrático" y que "deben dejarse a un lado las emociones y los tribalismos, e incluso los grandes postulados de la apuesta partidaria" ante la urgente renovación del CGPJ. "Es la hora de los grandes políticos y de los grandes demócratas. Sería una enorme decepción sentir su falta", ha precisado.

Así, ha recordado que las democracias también mueren si se debilitan las instituciones, por lo que ha pedido a los actores políticos "un verdadero compromiso" para garantizar "el buen funcionamiento y la independencia del Poder Judicial", algo que ha defendido que pasa por situar a la Justicia por encima de "los intereses partidarios". Ha citado la obra 'Cómo mueren las democracias', de Steven Levitsky y Daniel Ziblatt, para señalar que "en nuestros días, la democracia ya no muere necesariamente por un acto violento o dramático, esto es, con un golpe militar o una revolución, sino con un lamento prolongado: el lento y progresivo debilitamiento de las instituciones esenciales, como son el Poder Judicial y la prensa, y la erosión global de las normas políticas tradicionales".

"Un asunto de Estado"

Por eso, Marín Castán ha defendido que "el buen funcionamiento de la Justicia debe ser un asunto de Estado", indicando que "cuando ese buen funcionamiento está en entredicho todos los actores políticos deben ser conscientes de que las altas responsabilidad que el pueblo soberano les ha confiado están por encima de los intereses partidarios".

Esta voz del Supremo ha reclamado a los políticos una doble acción: positiva, para "situar como objetivo de la acción de política el buen funcionamiento y la independencia del Poder Judicial por encima de los intereses partidarios"; y otra "negativa" para "abstenerse de todo comportamiento que de alguna manera pueda erosionar la consecución del mencionado objetivo".

También ha destacado que "los ataques a la independencia judicial pueden tener diversos orígenes y mostrar múltiples variantes", exponiendo que "en ocasiones son comportamientos activos, de intromisión directa o indirecta en la toma de decisiones judiciales para influir en ellas, procedentes incluso de los propios dirigentes políticos", pero que también "pueden surgir de comportamientos omisivos, mucho más sutiles y por ello más peligrosos para el funcionamiento del sistema democrático".

Por otro lado, se ha referido al estado del Supremo para calificarlo de "desolador" por la crisis de vacantes ante la imposibilidad de que el CGPJ realice nombramientos discrecionales. Y ha incidido en que el tribunal suma ya 23 vacantes en todas sus salas: 2 en la de lo Civil, 1 en la de lo Penal, 11 en la de lo Contencioso-Administrativo, 6 en la de lo Social y 3 en la de lo Militar -con la jubilación efectiva este jueves del magistrado Fernando Pignatelli -.