Euskadi celebra este domingo el Día de la Patria Vasca marcado por un fuerte carácter electoral. Bildu ha secundado una manifestación en Pamplona, mientras que el ha protagonizado su habitual acto institucional PNV. En él, el presidente Andoni Ortuzar, ha reivindicado "la libertad de Euskadi" como nación en Europa, al tiempo que ha pedido a los votantes nacionalistas más alcaldes y junteros de su partido para "avanzar como nación".

Así se ha pronunciado Ortuzar en la celebración del Aberri Eguna en la Plaza Nueva de Bilbao en un acto en el que también ha intervenido el lehendakari, Iñigo Urkullu, ante miles de afiliados y simpatizantes de esa formación, ante quienes ha asegurado que "el norte del PNV es la libertad de Euskadi".

Ha reflexionado sobre la solidez y la unidad de Europa, porque "aunque va muy lenta en su unidad política, siga en manos de egoísmos estatales y no termine de encontrar un encaje a realidades nacionales sin Estado como Euskadi", sin esa actuación conjunta ante la invasión de Ucrania, "las cosas habrían sido muy distintas y, seguramente, mucho peores".

Además, ha destacado que "Europa es el mayor espacio de libertad, respeto a los derechos humanos y justicia social de todo el mundo" y por ello el PNV "es europeísta y está siempre con Europa, la democracia y el progreso. ¡Euskadi Nación europea!", ha reclamado. Ha afirmado que la celebración del Aberri Eguna de este año "tiene un aroma electoral" porque faltan 50 días para las elecciones del 28 de mayo y ha animado a los militantes de su partido a responder a su "toque de corneta" ante esos comicios para que el PNV siga liderando las instituciones.

"Si obtenemos nos buenos resultados, estaremos dando un paso más, subiendo un escalón más en el camino de Euskadi hacia su libertad" y con más representantes de PNV en las alcaldías y las juntas generales "se está garantizado que Euskadi avanzará como nación", ha sentenciado.

El PNV es "un partido auténtico" de abertzales, ha dicho, frente a otros, que "cuando se acercan unas elecciones, suele haber ejercicios de transformismo de partidos o coaliciones para ver si roban algún voto", en referencia a EH Bildu. Según ha ironizado, "meten en el armario el palestino, el forro polar y el flequillo cortado a motosierra, para ponerse chaquetas de diseño, camisetas de marca y cara de no haber roto nunca un plato".

Pero, ha asegurado, "por dentro siguen siendo los mismos" y "son los de la 'mani' aunque vistan de Armani", por lo que ha aconsejado a los militantes nacionalistas "estar muy concentrados" en las elecciones "para que no nos las den con queso".

Ortuzar ha felicitado al lehendakari por su gestión al frente del Gobierno Vasco y ha asegurado que los vascos sienten "confianza" en sus instituciones. A pesar "de todas las incertidumbres, Euskadi sigue hacia adelante" y ha destacado que "los buenísimos datos del empleo" que indican que la vuelta "a cotas de antes de la crisis de 2008".

En el mismo sentido, el lehendakari ha asegurado que Euskadi está "consiguiendo crecer", con un PIB que "ha aumentado un 30% en diez años", se han superado por primera vez los 32.000 millones de euros de exportaciones y ya hay casi un millón de vascos afiliados a la Seguridad Social, como "carta de presentación" de la gestión del PNV al frente de las instituciones.

Urkullu también ha defendido "trabajar paso a paso" y "en todos los frentes" con el compromiso para avanzar en el autogobierno, que "refleja una manera de preservar la identidad, avanzar en el bienestar y la convivencia, y construir una comunidad política diferenciada y singular".

Así, ha reiterado su apuesta por "seguir actualizando y renovando" el actual marco de autogobierno "en Euskadi y fuera de Euskadi". "Somos un país. Tenemos una identidad propia abierta al mundo que queremos desarrollar dentro de Europa, sumando para ello a diferentes agentes. Todas y todos por un mismo sueño. Con Navarra, con Iparralde (País Vasco francés)", y "siempre desde el consenso" y "desde el respeto, defendiendo un proyecto compartido", ha dicho.

Para este evento político el PNV ha habilitado un escenario de 180 metros cuadrados y una carpa de 300 metros cuadrados y, tras las intervenciones de ambos líderes, se celebrará una comida a la que está previsto que asistan 900 personas.