Recoger la carta de despido y pasar por ventanilla en Hacienda supondrá según los sindicatos, una zancadilla más para la negociación colectiva. Pero hay además pegas legales, el Gobierno quiere que las indemnizaciones tributen desde el pasado viernes y los juristas le piden echar el freno.
Por ello los despachos animan a reclamar a todo aquel que se vea obligado a tributar por su despido antes de la aprobación definitiva de la reforma. El PP sigue negando que exista malestar por este castigo fiscal y el Gobierno continúa defendiendo las bondades de la reforma.
Pero fuentes de Moncloa reconocen a laSexta que habrá que matizar el texto en sus puntos más controvertidos y Montoro ya empieza a tender la mano. Un campo que tras conocerse la letra pequeña de la reforma, aparece plagado de minas.