A punto de cerrarse el primer trimestre del año escolar, los datos que arrojan los expertos hacen ver que las medidas contra el coronavirus están funcionando.

Los niños y adolescentes se ponen ahora menos enfermos que hace un año por estas fechas. Eso sí, la pediatra Dora Berajamo nos asegura que las consultas telefónicas son "cada vez más potentes".

Los virus estomacales que se dieron a comienzo de curso, que dejaban a toda la familia vomitando varios días, prácticamente han desaparecido, igual que las bronquitis, las anginas o las diarreas.

El uso de mascarillas obligatorias en los colegios y el no ver a la familia son factores claves para proteger frente a otras infecciones que no sean el coronavirus, además de la recomendación de que los niños no acudan a los centros si tienen síntomas.

Esto repercute en las farmacias: la venta de antigripales ha caído un 20% respecto a 2019. Una 'visita' habitual durante el año escolar son también los piojos, pero este año la distancia social también los ha mantenido lejos. La venta de tratamientos ha caído un 40% respecto al año anterior.