Diversos empresarios pagaron la regularización fiscal del rey emérito. Los amigos de Juan Carlos llegaron a reunir hasta 250.000 euros por cabeza, cuyos nombres han sido conocidos ahora: Vicente Boluda, Jaime Castellanos, Alejandro Aznar y Diego del Alcázar, entre otros.

De acuerdo con El Confidencial, la colecta fue organizada por Javier Corsini, gestor de una de las fincas de caza del rey emérito. De hecho, Boluda, presidente de la corporación Boluda —una importante empresa marítima—, ha reconocido que fue uno de los prestamistas de Juan Carlos I para pagar una segunda deuda tributaria, tras la regularización que hizo en diciembre del pasado año, en la que tuvo que pagar 678.393 euros.

Según el citado medio, el número final de mecenas del emérito apenas llega a la decena, mientras Corsini fue clave para reunir la cifra demandada, superior a los 4 millones de euros. En concreto, este empresario es el propietario de Great Spanish Hunts, una empresa que gestiona una finca en los alrededores de Aranjuez, donde Juan Carlos iba a cazar regularmente.

Entre los intermediarios también suena el nombre de Félix Sanz Roldán, exdirector de Centro Nacional de Inteligencia (involucrado en un juicio con el excomisario Villarejo por unas presuntas amenazas a Corinna Larssen, examante del emérito).

También figuran en esta lista Alejandro Aznar, presidente de las Bodegas Marqués de Riscal, y la inversora Alicia Koplowitz que, según personas cercanas a las negociaciones, también habría participado en la regularización del exmonarca. Junto con eso, las citadas fuentes remarcan que también hay una serie de empresarios que, por el contrario, se negaron a contribuir en esta colecta. Entre ellos, Alberto Alcocer, amigo íntimo de Juan Carlos; Alberto Cortina, Rafael del Pino, presidente de Ferrovial, José Manuel Entrecanales, accionista de Acciona o Borja Prado, expresidente de Endesa, según El Confidencial.

Podría ser el último pago

Esta regularización con el fisco podría ser la última. Además, desde la Fiscalía argumentan a laSexta que se trata de un asunto tributario y que, por lo tanto, depende de la Agencia Tributaria y el Ministerio de Hacienda. Respecto a si se revisará que todo se ha realizado en orden, algo que ya se hizo con la primera regularización, indican que "todo sigue su curso y no hay más información al respecto".

Una vez realizada esta segunda regularización, el equipo jurídico de Juan Carlos I estima que ya no habrá un tercer pago. Con estas operaciones, sus asesores están tratando de evitar una querella por delito fiscal.

El objetivo del ex jefe del Estado era asumir este pago cuando llevó a cabo la primera operación, en el mes de diciembre, pero se ha retrasado debido a la dificultad para reunir el montante abonado. Esta vez, Juan Carlos I no ha recurrido a la línea de liquidez bancaria que utilizó para la primera regularización sino que en esta ocasión ha contactado con amigos empresarios para firmar con ellos préstamos y reunir el dinero suficiente.

Esta segunda liquidación de 4.395.901,96 euros se corresponde con "las rentas derivadas de la asunción, por la Fundación Zagatka, de determinados gastos por viajes y servicios realizados por S.M. de lo que podrían derivar determinadas obligaciones tributarias que han quedado regularizadas". Así se señala en un comunicado emitido por Javier Sánchez-Junco, el abogado del emérito.