Pablo Casado ha rechazado colaborar en un pacto para imponer un "cordón sanitario" a Vox con el objetivo de impedir el acceso del partido de extrema derecha a la Mesa del Congreso. "El PP nunca participará de cordones sanitarios frente a partidos constitucionalistas", ha señalado el líder 'popular' en la rueda de prensa que ha ofrecido en Zagreb, Croacia.

De esta forma, Casado ha dejado claro que el PP no unirá sus votos a los del PSOE y Unidas Podemos para intentar que Vox, que logró 52 de diputados en las elecciones del 10 de noviembre, no forme parte de la Mesa de la Cámara.

Los miembros de este órgano se elegirán el 3 de diciembre, cuando se constituirá el nuevo Congreso. Al margen de la Presidencia del Congreso, que consigue la persona más votada, tanto las cuatro Vicepresidencias como las cuatro Secretarías se eligen en sendas votaciones secretas mediante papeleta en urna, por lo que, para superar a los 52 votos de Vox hay que reunir al menos 160 votos, o hasta 200 si quieren conservar la primera Vicepresidencia.

Una vez que Casado se ha desmarcado de esta opción, sólo será posible evitar que Vox acceda a esos cargos institucionales mediante un acuerdo entre el PSOE, Unidas Podemos y buena parte de las fuerzas nacionalistas e independentistas.

Casado subraya que el PP siempre ha criticado los "cordones sanitarios"

El líder del PP ha explicado su posición subrayando que su formación siempre ha criticado los "cordones sanitarios" como el que, ha recordado, se creó contra el PP catalán en 2006, cuando el entonces candidato de CiU, Artur Mas, a la Generalitat llegó a comprometerse "ante notario" a no pactar con los 'populares'.

"No podemos hacer lo que criticamos", ha indicado, criticando de que es el PP que el sufre un "cordón sanitario" porque el líder del PSOE, Pedro Sánchez, ni les "llama" ni les "convoca".

"No podemos negociar nada con partidos que están en la ilegalidad"

Además, ha destacado que el PP no puede "negociar nada con partidos que están en la ilegalidad y la inconstitucionalidad", en referencia a los independentistas que son, en su opinión, quienes han creado un "cordón sanitario frente a la Constitución".

En la pasada legislatura, el PP ya se negó a aplicar a Vox ese 'cordón sanitario' en las comisiones parlamentarias y posibilitó que ocuparan puestos en las mesas. El Grupo Popular, con sus 88 diputados, tiene aseguradas, al menos, una Vicepresidencia y una Secretaría de la Mesa.