El Ayuntamiento de Premià de Dalt (Barcelona) ha contratado a la polémica organización Desokupa, que se dedica a desalojar inmuebles extrajudicialmente, para recibir asesoramiento contra "las okupaciones mafiosas". Según ha informado el consistorio a través de un comunicado, el contrato de asesoramiento e intermediación con la controvertida organización tiene una duración de un año y su coste es de 3.000 euros más IVA.

El Ayuntamiento ha defendido que esta empresa "ofrece un método alternativo que tiene por objeto la resolución amistosa de la controversia existente y evitar, en la medida de lo posible, un procedimiento judicial para la recuperación de la posesión de la vivienda en cuestión por parte de la propiedad".

El alcalde de la localidad, Josep Triadó (JxCat), ha explicado que este asesoramiento es únicamente para "ocupaciones mafiosas" perpetradas por "auténticas bandas organizadas" y ha destacado que la tipología de la población que vive en Premià de Dalt es susceptible a sufrir esta problemática.

Ha asegurado que esperan que este asesoramiento de Desokupa tenga un efecto "disuasorio" y, preguntado sobre las críticas de entidades antidesahucios a esta organización, ha asegurado que "todo el mundo tiene derecho a opinar". El alcalde ha remarcado que se trata de un asesoramiento, lo que significa que esta organización no actúa, sino que es la Policía Local quién lo hace "de acuerdo con los criterios que considere oportunos", y que en casos de ocupaciones motivadas por situaciones de pobreza hay seguimiento por parte de servicios sociales.

Según la web de Desokupa, esta organización media entre el propietario y los okupas "sin ningún tipo de violencia y con la presencia de un abogado que está presente en todas las negociaciones para garantizar que no se infringe la ley". Por otra parte, las organizaciones antidesahucios han criticado los métodos que usa esta organización y en 2016 llegó a organizarse una campaña bajo el nombre 'Stopdesokupa' "con el objetivo de visibilizar y combatir la contratación de matones por parte de propietarios especuladores".