El Ayuntamiento de Barcelona ha acordado este miércoles impedir la presencia de Vox en sus órganos, en los encuentros de trabajo con entidades y evitar que prosperen sus iniciativas para "consolidar" su compromiso en la defensa de la democracia y reafirmarse como una "institución libre de discursos de odio" y "discriminaciones".

A propuesta del grupo municipal de Barcelona en Comú y con los votos a favor de todos los grupos, excepto PP y Vox, que han votado en contra, la Comisión de Presidencia, Seguridad y Régimen Interior ha acordado adoptar los acuerdos incluidos en el documento 'Por un Ayuntamiento comprometido con la democracia, los derechos y la diversidad'.

Los grupos municipales que han firmado este documento, TriasxBarcelona, PSC, BComú y ERC, se han comprometido a "utilizar los espacios de intervención en el Ayuntamiento para combatir y no permitir los discursos de odio, defendiendo los derechos humanos y contrarrestando las informaciones falsas que puedan inducir a discriminaciones y vulneraciones de derechos humanos".

Asimismo, se acuerda impedir la presencia de la extrema derecha (Vox, con dos concejales en el actual Consejo Municipal de Barcelona) en la presidencia de los Distritos, las Comisiones del Consejo Municipal, en futuras comisiones de estudio o de investigación y no convocar a ese partido a los encuentros de trabajo entre los grupos municipales y entidades para abordar temáticas concretas.

Para "no normalizar ni legitimar la acción política de formaciones de extrema derecha", han decidido no suscribir ninguna iniciativa conjunta con estas formaciones y evitar que prosperen sus iniciativas, así como modificar el requisito de unanimidad para las declaraciones institucionales para evitar que "la extrema derecha pueda vetar aquellas declaraciones a favor de los Derechos Humanos, la no discriminación, la paz y la convivencia".

La comisión municipal ha acordado también revisar el código ético del Ayuntamiento para que establezca que "los cargos electos llevarán a cabo sus intervenciones en todas las sesiones de los órganos municipales con la debida cortesía, el respeto a los derechos, libertades y principios, reconocidos en el Código Ético, el Estatuto, la Constitución y la Declaración de Derechos Humanos".

Además, el acuerdo emplaza al gobierno del alcalde Jaume Collboni y a los grupos municipales firmantes para que se comprometan a participar de forma activa y conjunta en las conmemoraciones institucionales, como la Noche de los Cristales Rotos, las del genocidio del Pueblo Gitano y en general aquellas referentes a la Memoria Democrática.