Chanchullos en la ultraderecha
Los audios que demuestran que Abascal conocía las presuntas irregularidades en Revuelta: "Santiago ha estado preguntándome desde las siete de la mañana"
Los detalles Las conversaciones entre varios dirigentes de Vox y su asociación juvenil demuestran que el presidente del partido estaba al tanto de la situación, y que su preocupación le hacía estar "como una moto".

Resumen IA supervisado
Santiago Abascal estaba al tanto de las presuntas irregularidades en la financiación de Revuelta, la asociación juvenil vinculada a Vox, según conversaciones reveladas por 'El Mundo'. En marzo de 2025, Kiko Méndez-Monasterio, asesor de Abascal, presionó a Revuelta para alinearse completamente con el partido, afirmando que era una extensión de Vox. Montserrat Lluís también buscó reforzar esta relación, alertando sobre la preocupación de Abascal por el asunto. Vox era consciente de los problemas financieros de Revuelta y amenazó con acciones legales si no se resolvían. Ahora, tras el escándalo, Vox intenta distanciarse de Revuelta, temiendo repercusiones electorales.
* Resumen supervisado por periodistas.
Santiago Abascal estaba al tanto de las presuntas irregularidades que se habrían cometido en la financiación de Revuelta, la asociación juvenil vinculada a Vox. Así lo demuestran las conversaciones mantenidas entre los altos cargos del partido y la cúpula de sus 'cachorros' que han sido desveladas por el diario 'El Mundo'.
Ya en marzo de 2025, Kiko Méndez-Monasterio, asesor y mano derecha de Santiago Abascal, presionó a Revuelta para que sus dirigentes entendieran que eran una organización al servicio del partido: "No puede haber una asociación independiente del partido, porque Revuelta es del partido. El partido ha financiado a Revuelta".
También buscó esa sintonía Montserrat Lluís, secretaria general adjunta de Vox. "Si Revuelta es Vox, que lo sea para todo; hagamos esto como un satélite de verdad del partido", avisaba a Pedro González Gasca, secretario general de Revuelta y responsable de Marketing de Vox.
En esa conversación, Lluís alertaba de que los chanchullos y las tensiones entre Vox y Revuelta estaban despertando la preocupación de Abascal: "¿Santiago? Pues desde las siete de la mañana preguntándome si había podido averiguar esto". Una cuestión que, en nombre de la propia dirigente, ponían al líder de Vox "como una moto".
Vox era consciente de lo que ocurría en las arcas de Revuelta mucho antes de que llegara su denuncia, y ante la inacción de los jóvenes, el partido amenazó con tomar acciones legales sin no se arreglaban las cosas. "Tenemos que adelantarnos antes de que salga un titular de que Vox está metido en esto", le exponía Lluís a González Gasca.
De esta forma, la cúpula de Vox pretendía poner fin a un funcionamiento propio de "la casa de Tócame Roque". "Si queremos gobernar España no podemos funcionar así", apuntaba la dirigente del partido ultra, dejando claro que conocía todos los pormenores de las presuntas irregularidades en la financiación de las juventudes de Vox.
Ahora, tras el estallido del escándalo, Vox sostiene que Revuelta "no forma parte" del partido para echar balones fuera de un escándalo que temen que pueda pasarles factura en las urnas a las puertas del gran ciclo electoral de 2026.
*Sigue a laSexta en Google. Toda la actualidad y el mejor contenido aquí.