El Partido Popular ya lo ha meditado y decidido. Javier Maroto, vicesecretario de la formación, ha dicho que "la posición es la abstención".
Se abstendrá en la votación que convalidará la exhumación de Franco vía decreto ley. "Debe haber un gobierno que no rebusque y rasque en una tumba de hace 40 años", ha apuntado Maroto.
Responde así a la demanda que le hacía la vicepresidenta Carmen Calvo en una entrevista en El Periódico de Extremadura: "No deben enredarse en las formas, deben retratarse y decir sí o no".
Lo que, de momento, esquivan es aclarar si finalmente recurrirán al Constitucional la fórmula de urgencia para sacar a Franco del Valle de los Caídos. "Ese asunto no va con el PP, nos abstenemos con absoluta indiferencia", ha destacado Maroto.
Desde el partido del Gobierno insisten en que la aprobación por decreto está justificada. Iratxe García, secretaria de UE del PSOE, ha dicho en Torrelavega que "es urgente devolver la dignidad a la democracia del país".
En ese proceso, el Gobierno chocará de frente con la familia Franco, que ha anunciado que agotará todas las vías legales para impedir la exhumación. El nieto del dictador, Francis Franco, asegura en La Razón que confía en que el prior del Valle actúe en conciencia y siga oponiéndose a la exhumación.
"Mi abuelo defendió a la iglesia, ese mismo deber de actuar en conciencia será lo que, presumo, adoptarán los benedictinos y gran parte de la iglesia", ha dicho el nieto de Franco.
Pero, la iglesia, según el Gobierno, no sería un impedimento. "El Gobierno dispone de instrumentos en el marco de los acuerdos con la iglesia para proceder", dijo en rueda de prensa Carmen Calvo, vicepresidenta del Gobierno.
Ciudadanos, que también se abstendrá en la convalidación del decreto ley, exige consenso. Inés Arrimadas, en otra entrevista en El Periódico, dice que están dispuestos a hablar para buscar una solución "global" al Valle de los Caídos y que se convierta en un "espacio de reconciliación".