La política hace extraños compañeros y se demuestra, por ejemplo, en Ourense. Pérez Jácome, que basó toda su campaña electoral en atacar a los de Baltar, a veces incluso más allá del insulto, ha tomado el bastón de mando gracias al PP de Baltar a cambio de mantenerle en la Diputación.

En Cartagena, una sorprendente foto forja el abrazo de dos mujeres, una del PSOE y otra del PP, que se reparirán el poder con el apoyo de Ciudadanos. Era el momento en el que la socialista Ana Belén Castajón tomaba un bastón de mando que solo tendrá durante dos años, ya que, en 2021, la popular Noelia Arroyo sea proclamada alcaldesa.

En Galdakao, Íñigo Hernando de EH Bidu ha arrebatado la alcaldía a un PNV que la gobernaba desde la Transición. Para ello han tenido que sumar sus votos a los de una agrupación vecinal y otros dos partidos locales.

También Bildu se ha quedado con la alcaldía de Samaniego. Ha sido gracias a un concejal del PSOE, Eduardo Pascual, que ha dado su voto para que Pilar Garmendia sea alcaldesa.

En Roales del Pan David García se ha convertido en el único alcalde de Vox de la provincia de Zamora. Siendo el único concejal de este partido en una corporación de siete, recoge el bastón gracias a los votos de dos concejales del PP y uno del PSOE.

Y en Jerez de los Caballeros ha ocurrido el pacto más extraño: el único concejal de Podemos de la corporación es ya alcalde tras un pacto con el Partido Popular y Ciudadanos para desplazar al PSOE en un Pleno que ha estado cargado de tensión.