Seis años sin verse
Trump y Putin, dos líderes con una relación de vaivenes a las puertas de su reunión más importante en Alaska
Los detalles Los presidentes de Estados Unidos y Rusia llevan sin verse en persona desde 2019, un tiempo muy largo en el que les ha dado tiempo a cambiar su visión del otro en numerosas ocasiones. Ambos son capaces de pasar del amor al odio en cuestión de minutos.

Resumen IA supervisado
La reunión entre Donald Trump y Vladímir Putin este viernes en Alaska está marcada por una relación de altibajos. Desde su último encuentro en 2019, su interacción ha sido tensa, con Trump amenazando a Putin con "consecuencias severas" si no se negocia la paz en Ucrania. Aunque en el pasado hubo señales de acercamiento, como los halagos de Putin hacia Trump, las tensiones aumentaron tras la fallida propuesta de reunirse en Estambul. Trump criticó duramente las acciones de Putin, especialmente en Ucrania. Este esperado cara a cara es visto con expectativa, mientras Ucrania observa desde la barrera.
* Resumen supervisado por periodistas.
La reunión entre Donald Trump y Vladímir Putin que tendrá lugar este viernes viene marcada por la relación de altibajos que ambos mandatarios han mantenido a lo largo de los años, unos vaivenes que ahora parecen haberse detenido de cara a ese encuentro en Alaska.
Putin y Trump no se ven cara a cara desde 2019. Desde entonces, ambos juegan con las palabras, con un Trump que ha cambiado su discurso amenazante a lo largo del tiempo, llegando a amenazar a Putin con "consecuencias severas" en caso de no acceder a negociar una paz en Ucrania.
"He tenido un montón de buenas conversaciones con él (Putin) y después llego a casa y veo un misil estrellándose contra un hospital", comentó en una ocasión al ser preguntado si creía que podría convencer al mandatario ruso de firmar la paz. No hace tanto, entre ambos parecía haber, al menos, señales de acercamiento. Para Trump, todo pasaba por un cara a cara y Putin respondía con halagos.
"No va a pasar nada hasta que Putin y yo nos reunamos, ¿vale?", decía Trump, por un Putin que le definía como "una persona inteligente y experimentada". Pero en este baile ha habido varios pisotones, como la propuesta de verse en Estambul que nunca llegó. Eso enfureció al inquilino de la Casa Blanca que llegó a decir que Putin estaba loco.
"No estoy contento con lo que Putin está haciendo. Está matando a muchas personas", llegó a criticar, haciendo su típica cuenta atrás en forma de ultimátum que, finalmente, ha desembocado en el esperado cara a cara de este viernes. Mientras, en Ucrania, principal damnificada, esperan pacientes desde la barrera.