El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha ordenado a los consulados estadounidenses que denieguen visados de entrada al país a aquellos inmigrantes sin seguro médico o que no puedan pagar por su salud, según anunció la Casa Blanca.

En una proclamación, el presidente ordenó a los funcionarios consulares que denieguen visados a no ser que los solicitantes demuestren que tienen "los recursos financieros para pagar los costos médicos" mientras estén en Estados Unidos o que "estarán cubiertos por un seguro médico aprobado".

La medida debe entrar en vigor a partir del próximo 3 de noviembre.

"Si bien nuestro sistema de atención médica enfrenta los desafíos causados por la atención médica no pagada, el Gobierno de EEUU está agravando el problema al admitir a miles de extranjeros que no han demostrado capacidad alguna para costear sus gastos médicos", afirmó Trump en la proclamación.

Para probar su tesis, el presidente, defendió que "los datos muestran que los inmigrantes legales tienen una probabilidad tres veces mayor que los ciudadanos de Estados Unidos de carecer de seguro médico".

"Los inmigrantes que ingresan a este país no deberían ser una carga para nuestro sistema de salud y, en consecuencia, para los contribuyentes estadounidenses", concluyó.