El Kremlin está "absolutamente convencido" de la "liberación" del Donbás y de la desmilitarización de los territorios aledaños en el este de Ucrania. Y es que larendición de casi todos los defensores de la acería de Azovstal en la ciudad portuaria de Mariúpol ha supuesto un acicate para las tropas rusas, que tras los reveses en el campo de batalla ahora se ven con posibilidades para cumplir sus objetivos.

"En primer lugar, al Donbás le espera la completa liberación de los territorios históricos. Estoy absolutamente convencido de que el ejército ruso y las milicias populares de Donetsk y Lugansk restablecerán las fronteras históricas", ha dicho Serguéi Kiriyenko, exprimer ministro de Rusia y subjefe de la administración presidencial.

Kiriyenko ha subrayado que Moscú no se conformará con eso, ya que aspira a "desmilitarizar los territorios aledaños para que dejen de volar misiles y obuses sobre el territorio del Donbás". "El futuro del Donbás lo decidirán sus habitantes. Estoy seguro de que tendrán esa posibilidad", ha subrayado.

De este modo, los rusos siguen empeñados en lograr los objetivos que se marcaron al inicio de lo que denominaron "operación militar especial", es decir, desde que el pasado 24 de febrero comenzó la invasión rusa.

Durante estos 85 de contienda, Rusia no ha hecho más que sumar enemigos y potencias que han tratado de bloquear al país económicamente para sancionar al gobierno de Vladímir Putin por la guerra. En el Kremlin aseguran que el país "a día de hoy no combate sólo con Ucrania". "Contra nosotros combate un Occidente unificado, simplemente que en territorio de Ucrania y con manos ucranianas. Es una situación dramática, pero es así", ha destacado el político.

Aunque reconocen que se han aplicado "sanciones sin precedentes", cree que Occidente ha quedado en "ridículo" después de que tras casi tres meses de guerra la población, dice, haya cerrado filas con su presidente.

Lo cierto es que, en este punto, el ejército ruso está lejos de conquistar el Donbás, aunque estáa punto de liberar completamente Azovstal, símbolo de laresistencia ucraniana en Mariúpol. Las autoridades rusas han aprobado leyes para reducir al mínimo las críticas a la campaña militar en Ucrania, lo que ha provocado un incremento del exilio entre las personalidades más críticas con el Kremlin.