Se trata de la segunda movilización "Ni una menos" organizada en el país por grupos sociales, feministas y colectivos de lesbianas y homosexuales. Los familiares de las mujeres desaparecidas en los últimos años en Lima, así como de las víctimas de la violencia durante el conflicto armado interno de Perú, entre 1980 y 2000, encabezaron la marcha en la capital peruana.

Una de las mujeres símbolo de la primera marcha de 2016, Arlette Contreras, abogada que sufrió un intento de feminicidio en la ciudad de Ayacucho, participó también este año en la movilización tras haber sido galardonada en EEUU con el Premio Internacional a las Mujeres de Coraje. El agresor de Contreras, Adriano Pozo, fue liberado por la justicia a pesar de que su ataque quedó registrado por las cámaras de un hotel de Ayacucho.

De enero a junio pasados se registraron 59 feminicidios en Perú, un 11 % más que en el primer semestre de 2016, y 123 tentativas de feminicidio, un número similar al de igual periodo del año pasado, según cifras oficiales. El 68 % de las mujeres peruanas ha sufrido alguna vez de violencia física, psicológica o sexual por parte de sus parejas, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadistica e Informática.