Los partidarios del 'Brexit' han sido los primeros en retomar los actos de campaña. El ministro de Justicia, conservador, esgrime la actitud de Bruselas con los países del sur como argumento para salir de la Unión: "Si votamos por la salida el 23 de junio mandamos un mensaje de solidaridad con quienes lo están pasando mal en Grecia, España y Portugal: Pongamos fin a la miseria de la moneda única y restauremos la democracia en este gran continente".


Gove no ha hecho mención al asesinato de Jo Cox pero sí el ministro de finanzas que, en una entrevista, pide una campaña menos incendiaria y más basada en hecho. Osborne sigue insistiendo en el negativo impacto económico que tendría le 'Brexit': "Se calcula que nuestro PIB se contraería un 5% o 6%. Personalmente, creo que es posible que fuera bastante peor que eso".


Las encuestas publicadas pronostican un empate técnico, con una ventaja de sólo uno o dos puntos para la permanencia en la UE pero en un país donde la demoscopia ha fallado estrepitosamente en las últimas elecciones, hay quien cree que le mejor termómetro son las casas de apuestas. El 70% los que se juegan su dinero apuestan que Reino Unido votará por quedarse dentro de la Unión Europea.

Hay quien fía la predicción del resultado a la fauna local. En una granja del sur del país pronostican el resultado con una carrera de cerdos. Y aunque la Inglaterra rural es partidaria de abandonar la Unión los cerdos optan, de forma unánime, por Europa.