La Consejería de Salud y Consumo de Baleares ha activado este viernes por la noche el protocolo de atención en caso de sospecha de coronavirus después de detectar en Mallorca cuatro casos de personas de una misma familia que tuvieron contacto con uno confirmado en Francia.
El caso en investigación afecta a cuatro personas de origen británico de una misma familia, residentes en Mallorca, que han sido atendidas por profesionales sanitarios, ha detallado el departamento autonómico en un comunicado.
El padre ha acudido al Hospital Universitario de Son Espases y la madre y las hijas han sido trasladadas posteriormente al centro para su evaluación. La familia ha manifestado que estuvo en contacto con una persona que dio positivo por coronavirus, con sintomatología clínica, en Francia.
Siguiendo el criterio de los profesionales, el hombre se encuentra aislado y se han tomado ya muestras a todos ellos para enviarlas al laboratorio de Majadahonda encargado de los análisis. Todos ellos han quedado ingresados.
La Consejería de Salud y Consumo ha reiterado su mensaje de tranquilidad y de confianza en la labor de los profesionales, a la espera de que los resultados de las muestras determinen si se trata o no de coronavirus 2019-nCoV.
Asimismo, la Consejería ha recalcado que trabaja en estrecha colaboración con el Ministerio de Sanidad. Sanidad ha elaborado un protocolo de actuación ante la aparición de posibles casos sospechosos de coronavirus en España en colaboración con el Instituto de Salud Carlos III y las comunidades autónomas y se han puesto a punto las pruebas de laboratorio necesarias para poder confirmar los diagnósticos.
Miembros de la Consejería, el Servicio de Salud de Baleares (Ib-Salut) y el Hospital de Son Espases ofrecerán este sábado más detalles sobre este caso.
Solo hay un caso en España
El único positivo confirmado por coronavirus en España es un turista alemán que se encuentra aislado en un hospital de La Gomera. A pesar de que ha dado positivo en el análisis, evoluciona bien y sigue sin tener síntomas.
Mientras tanto, en el Gómez Ulla en Madrid, los españoles repatriados de Wuhan continúan su periodo de aislamiento a pesar de que siguen sin manifestar síntomas del virus.
El coronavirus ya ha dejado en diversas partes del mundo 636 muertos y más de 31.000 diagnosticados.