El viceministro del Interior de México, Humbergo Roque Villanueva, ha señalado que si bien el Gobierno de Enrique Peña Nieto espera que Estados Unidos incremente el número de deportaciones de mexicanos indocumentados una vez que Donald Trump asuma el cargo de presidente no creen que esto pueda ocurrir a corto plazo.
"Se espera que las deportaciones de cerca de seis millones de mexicanos indocumentados aumenten, pero no creemos que sea una medida que vaya a llevarse a cabo pronto, ni rápidamente", ha señalado en una entrevista.
"Los mexicanos allí son útiles para la economía estadounidense y el presidente Trump, el presidente electo, tiene que reconocer los efectos económicos de este compromiso de campaña", ha señalado Roque Villanueva.
Asimismo, Roque Villanueva ha afirmado que México está preparado para presionar al Congreso de Estados Unidos y recurrir a todos los medios a su alcance para bloquear el plan de Trump de retener las remesas para que México acabe pagando el muro que se comprometió a levantar en la frontera entre los dos países.
"No serán medidas de represalia", ha advertido, antes de afirmar que se tratará de "respuestas legales". "Estamos preparados para toda esa locura", ha concluido.