"No son altos mandos"
Giro en la investigación del robo en el Louvre: fue obra de delincuentes comunes, no del crimen organizado
Los detalles Dos de las cinco personas detenidas fueron acusadas formalmente por este delito, mientras que las otras tres quedaron en libertad sin cargos, según anunció la Fiscalía.
Resumen IA supervisado
El robo en el museo del Louvre ha sorprendido al revelarse que los autores no son profesionales del crimen organizado, sino delincuentes comunes, según la fiscal parisina Laure Beccuau. Este suceso ha generado críticas a la seguridad del museo. Hace dos semanas, dos hombres iniciaron el robo aparcando una furgoneta frente al Louvre, subieron en una grúa, rompieron una ventana y accedieron a la Galería de Apolo, de donde sustrajeron ocho joyas históricas, incluyendo piezas de la emperatriz Eugenia de Montijo. Dos personas han sido acusadas formalmente, mientras la investigación continúa.
* Resumen supervisado por periodistas.
El polémico y casi cinematográfico robo del museo del Louvre, en Francia, ha dado un giro de 180º al descubrirse que los presuntos autores de los hechos son delincuentes comunes, en lugar de profesionales del mundo del crimen organizado, como se creyó en un primer momento.
Así lo ha anunciado la fiscal parisina Laure Beccuau en declaraciones a los medios. El suceso ha dado la vuelta al mundo y ha provocado un aluvión de criticas a la seguridad de las instalaciones, a la que tachan de "insuficiente".
Hace ya dos semanas desde el momento en el que dos hombres aparcaron una furgoneta de mudanzas frente al reputado museo en lo que sería el inicio de uno de los robos del siglo. Tras subir en una grúa hasta el segundo piso, rompieron una ventana y accedieron al museo para abrir una de las vitrinas de la Galería de Apolo.
Los ladrones sustrajeron ocho joyas históricas, algunas de ellas pertenecientes a figuras emblemáticas de la realeza francesa y española. Entre ellas, destacan las que fueron de la emperatriz Eugenia de Montijo, esposa de Napoleón III y tía abuela de la duquesa de Alba, Cayetana Fitz-James Stuart. Tras siete minutos de golpe, huyeron en motos conducidas por dos cómplices.
"No los asociamos con los altos mandos"
"No se trata exactamente de delincuencia común... pero es un tipo de delincuencia que generalmente no asociamos con los altos mandos del crimen organizado y que están ascendiendo con bastante rapidez en casos extremadamente graves", ha declarado este domingo Beccuau.
Quizás eso explica que cinco fueran detenidos este miércoles en París, mientras hacían cola para ver un partido de fútbol. Este sábado, la Policía atrapó a otras dos personas más, ascendiendo a nueve el total de detenidos. Tres de ellos formarían parte del comando que ejecutó el golpe, mientras que el cuarto, considerado por los medios el cerebro de la operación, sigue huido.
La fiscal también ha informado de que dos de los acusados formalmente ya se conocían. Estuvieron implicados en un mismo robo en 2015. Uno de ellos es un hombre de 37 años con más de una decena de condenas. "Su historial delictivo muestra 11 condenas, incluidas unas 10 por robo", ha explicado la fiscal.
Entre los detenidos hay una mujer, que es la pareja de este último criminal, acusada de complicidad. La Policía Judicial también ha encontrado restos de su ADN. "Está devastada, niega los cargos que se le imputan y no entiende cómo está implicada", ha expresado el abogado de la mujer.
Sobre las joyas, las autoridades no pierden la esperanza de recuperarlas, aunque cada día que pasa esa posibilidad se esfuma todavía más.
Los medios franceses han especulado con que los ladrones eran aficionados ya que dejaron caer la joya más valiosa -la corona de la emperatriz Eugenia, hecha de oro, esmeraldas y diamantes- durante su huida. La investigación sobre este impactante suceso prosigue su curso a la espera de que se conozcan nuevos detalles.
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