Faltan dos días para las elecciones presidenciales de Estados Unidos y, como es habitual en estas fechas, los sondeos están echando humo. En los últimos meses han salido a la luz —prácticamente cada día— decenas de encuestas que se aventuran a vaticinar quién será el ganador de la contienda electoral. Cada una de ellas cuenta con sus matices, pero la media general de consultas deja consigo, hasta el momento, un claro favorito: Joe Biden, el candidato demócrata, tiene más posibilidades de alzarse con el poder en la Casa Blanca.

No obstante, la experiencia de las elecciones pasadas —en las que Hillary Clinton sufrió una dura derrota a pesar de partir con ventaja— recuerda que hasta que no pase la noche electoral nada estará decidido. Ahora bien, los datos recogidos por medios como el New York Times o Fivethirtyeight, que llevan años analizando procesos electorales, dan a entender que la progresión que está siguiendo Joe Biden es ligeramente distinta a la de su predecesora demócrata. De nuevo, Donald Trump está recortando distancia en la recta final, pero el margen es más amplio que hace cuatro años.

Ante este tipo de información, que varía considerablemente en función de qué entidad hace los sondeos, es interesante analizar la media total de encuestas. Si observamos la evolución de los últimos meses, mientras que en 2016 el espacio entre Trump y Clinton era cada vez más estrecho (especialmente a partir de octubre), en los días recientes Joe Biden ha sido capaz de aguantar sus diez puntos de diferencia con respecto al actual presidente, como se aprecia en los siguientes gráficos:

El día 8 de octubre de 2016 Hillary Clinton aventajaba a Donald Trump en 5 puntos, mientras que en esta misma fecha cuatro años después Joe Biden está a 10,1 puntos de su rival. También es interesante la línea que dibuja el porcentaje de voto del candidato republicano: en las pasadas elecciones, desde junio hasta octubre, sigue una dirección ascendente, mientras que en 2020 ha ocurrido todo lo contrario: cuanto más se aproxima el día de las elecciones, menos votos es capaz de recoger.

Ante esto, un punto de inflexión fue el positivo de Donald Trump por coronavirus el pasado 2 de octubre. Como ya contamos en laSexta.com, después de que se confirmara el contagio del presidente, la ventaja de Joe Biden aumentó. Asimismo, Reuters afirmaba a través de otra encuesta que la mayoría de los estadounidenses opina que Trump podría haber evitado su contagio si se hubiera tomado el virus más en serio.

La comparativa por estados: Biden cosecha más votos que Clinton

Con respecto a cómo han evolucionado las encuestas en el ámbito geográfico, las elecciones de 2020 también dibujan un panorama algo distinto a las de 2016. Hace cuatro años, en el mes de noviembre (a pocos días de las elecciones), Hillary Clinton era favorita en 26 estados, mientras que Donald Trump lo era en 25, según datos de Fivethirtyeight.

A finales de octubre de 2020 Joe Biden era favorito en 27 regiones, pero la relevancia está en cómo Donald Trump ha perdido terreno, especialmente por los tres estados en los que los sondeos todavía vaticinan un empate; es decir, Florida, Georgia y Iowa (en el primero, las últimas encuestas recogidas por el medio citado prevén una victoria del demócrata, aunque la diferencia es mínima con respecto a Trump). De este modo, mientras que en noviembre de 2016 la lucha estaba en 26-25 en favor de los demócratas, en 2020 está en 27-21, con algunos estados en duda.

En los mapas que acompañan estas líneas puedes ver la comparativa por estados entre las elecciones pasadas y las actuales. Pulsa sobre el mapa para saber cada estado y quién es el ganador.

Las encuestas de 2020 marcan que Joe Biden ganará en algunos estados en los que Clinton no era favorita, como Nebraska, Dakota del Norte o Arizona. Sin embargo, también hay un par de territorios donde la candidata anterior era favorita y donde el actual representante no lo es: estos son Carolina del Norte y Florida (en ambos acabó ganando Trump).

Asimismo, hay otra variación importante en estas encuestas: si bien Biden no es el principal candidato, algunos sondeos recogidos por el New York Times ahora dan empate en dos estados donde Hillary Clinton no era favorita hace cuatro años: Iowa y Georgia.

El mapa general dibuja una clara victoria para Biden, pero no hay que olvidar que Donald Trump todavía cuenta con el respaldo de algunos de los territorios más decisivos, como Ohio o Nevada. También está la incógnita de qué ocurrirá con el voto por correo y cómo afectará a estos nuevos comicios. Aunque dichas preguntas solo se podrán resolver una vez los estadounidenses hayan decidido.