Anton Gerashchenko, asesor del ministro del Interior de Ucrania, ha informado a través de Twitter de las consecuencias medioambientales de una catástrofe como la que está produciendo la ruptura de la presa de Kakhovka, una de las más grandes de Ucrania.

"Morirán decenas de miles de toneladas de peces y una biosfera única. Los nidos de millones de pájaros en los humedales a lo largo de la margen izquierda del río Dniéper se han inundado", ha afirmado el experto, que ha asegurado, además, que "el canal del norte de Crimea ahora se secará y permanecerá seco durante mucho tiempo y la gente del sur y de Crimea se quedará sin agua potable".

La presa, de 30 metros (yardas) de altura y 3,2 km (2 millas) de largo, retiene agua equivalente a la del Gran Lago Salado en el estado estadounidense de Utah. Fue construida en 1956 en el río Dnipro como parte de la central hidroeléctrica Kakhovka y su importancia es vital para la región: abastece de agua a la península de Crimea, anexionada por Rusia en 2014, y a la central nuclear de Zaporiyia, también bajo control ruso.

Además, se estima que en apenas horas podría inundar al menos 80 asentamientos situados a la orilla del río Dnipro. Ya en octubre de 2022, las autoridades prorrusas de la región ucraniana de Jersón comenzaron a liberar agua de la presa de Nova Kajovka para reducir el nivel del agua y minimizar un posible desastre si la presa era objetivo de ataque.

Ucrania acusó entonces a Rusia ante el Consejo de Seguridad de la ONU de haber colocado minas en los alrededores de la central hidroeléctrica y la presa de Kajovka. "Los terroristas rusos han minado la presa y los agregados de la central hidroeléctrica de Kajovka, cuya destrucción sometería a más de 80 asentamientos y a cientos de miles de personas a una rápida inundación", sostenía el representante permanente de Ucrania ante la ONU, Sergii Kislitsia.

Zelenski iba aún más allá y advertía de que un ataque ruso a la presa de Kajovka sería equiparado al uso de armas de destrucción masiva, ya que podría llevarse por delante a más de 80 localidades, entre ellas Jersón. "En el caso de la destrucción de la represa Kajovka, el Canal del norte de Crimea simplemente desaparecerá. Y si Rusia está preparando tal ataque terrorista, si está considerando seriamente tal escenario, significa que los terroristas son muy conscientes de que no solo pueden controlar Jersón, sino también todo el sur de nuestro país, incluida Crimea", aseguró el presidente ucraniano.