El FBI detuvo este jueves en la localidad de North Dighton (Massachusetts) al supuesto autor de las filtraciones de documentos secretos de Estados Unidos, que podría ser la más grave en una década. El FBI ha confirmado en un comunicado que había efectuado un arresto en North Dighton y, aunque no detalló quién es la persona detenida, medios de comunicación de EEUU aseguran que se trata de Jack Teixeira, de 21 años y miembro de la Guardia Nacional Aérea de Massachusetts.

Las televisiones estadounidenses mostraron el gran dispositivo policial que se montó alrededor de la vivienda del joven en North Dighton de Teixeira, con helicópteros sobrevolando los alrededores. Vestido con ropa muy informal, camiseta y pantalón corto, Jack Douglas Teixeira, el ultrarreligioso amante de las armas que filtró documentos secretos de EEUU, salía de su casa en Massachusetts con las manos en la cabeza. Estaba rodeado por los SWAT, quienes dirigían la operación.

Tal y como se puede ver en el vídeo principal que acompaña a esta noticia, los agentes le piden al joven, de 21 años, que camine hacia ellos, y cuando se está acercando al furgón, le ordenan que se dé la vuelta y camine de espaldas. En ese momento, seis hombres de las Fuerzas Especiales armados le apuntan con rifles, mientras uno de ellos le pone los grilletes.

La detención de Teixeira ha sido analizada al milímetro. En un primer momento, querían detenerlo cuando fuera a la base militar en la que trabaja, pero justo este jueves no acudió a su puesto de trabajo. Además, las informaciones publicadas en los medios de comunicación y el hecho de que tuviera armas de asalto que sabía manejar precipitaron su arresto.

El FBI llevaba días vigilando su casa y su entorno. Este viernes, el joven va a declarar en un tribunal de Boston como sospechoso de filtrar docenas de documentos clasificados. En concreto, será juzgado por la "supuesta extracción, retención y transmisión no autorizada de información clasificada de defensa nacional", ha indicado Merrick Garland, fiscal general de EEUU.

Nadie sospechaba de este joven de familia patriótica, con veteranos en el Ejército. Él también tenía una carrera militar, de la que su madre presumía orgullosa en las redes sociales. Jack, de 21 años, llevaba desde 2019 trabajando como guardia Nacional del Aire en Massachussets, en redes de comunicaciones del ala de inteligencia, un cargo que pone en evidencia la seguridad del Pentágono.