Trabajos temporales, sueldos precarios, inflación y alquileres imposibles. Es el día a día de los jóvenes en España, muchos de los cuales o no se pueden independizar o, si lo hacen, es a costa de "pagar más del 60, 70 u 80% de sus salarios en el alquiler", según denuncian desde el Sindicato de Inquilinas de Madrid.

Comprar una casa es una posibilidad incluso más remota para buena parte de los jóvenes. Una situación crítica que abre un nuevo mercado en España: la venta de habitaciones. Manuel Hernández, director de Vilches Abogados, explica que "realmente lo que sea adquiere en sí es una copropiedad, un condominio, es decir: un porcentaje de un inmueble".

Por unos 400 euros al mes se podría acceder a una habitación como propietario, no como inquilino. Es lo que propone la plataforma Habitación.com, que intenta acercar el mercado inmobiliario a los jóvenes. Su CEO, Oriol Valls, señala que "una habitación en Barcelona puede estar en torno a los 45.000, 50.000" euros e incluso por encima si es en una zona como el Paseo de Gràcia.

Una solución habitacional, asegura, pero, sobre todo, un mecanismo de ahorro: "Sabemos que la gente no acabará viviendo en una habitación, sino qué es más un activo de transición", precisa Valls, que afirma que se "puede decidir vender esa esa habitación y recuperar todo ese ahorro" depositado allí o bien alquilarlo como propietario.

En algunos sectores preocupa que esto pueda provocar un aumento aun mayor de los precios de las viviendas. En este sentido, Hernández advierte de que "una cosa cuando se divide por partes suele implicar un mayor precio y por tanto, evidentemente puede generar un sistema de negocio para los propietarios transmitentes más que un sistema de ayuda a los jóvenes para acceder a la vivienda".

Por su parte, Carlos Castillo, del Sindicato de Inquilinas, alerta de que esta posibilidad "redunda un poco en la idea de la vivienda como bien de mercado con el cual se puede especular y no de la vivienda como derecho".